MASIVA ADHESIÓN A UN SOSTENIDO RECLAMO POR “NI UNA MENOS”

Multitudinaria concentración en la ciudad.

No era, la de este viernes (3), la tarde más apropiada, sobre todo cuando se vino la bajada del sol, que había acariciado una porción de la tarde después de días de lluvia persistente y molesta.

Sin embargo, las adyacencias a la Plaza Rivadavia se vieron progresivamente colmadas por una concurrencia que respondió, con creces, al llamado por “ni una menos”, que se formuló a nivel país y que tuvo, aquí –en la Bahía Blanca muy indiferente por lo común– una respuesta ampliamente favorable.

Hubo arengas, breves pero elocuentes, como la de Mónica Cid, mamá de Micaela, de cuya muerte se tuvo conocimiento el pasado sábado (28), después de una infructuosa búsqueda por 35 días; y la de Wanda Banegas, prima de Katherine Moscoso, asesinada en mayo del año pasado en Monte Hermoso.

Se leyeron documentos referidos a distintos casos de femicidios, que fueron historiados en pormenorizados informes.

Confundidos en la muchedumbre, hubo políticos presentes, como los casos de Jaime Linares, exintendente de la ciudad y actual senador nacional; su hermana Virginia, que concluyó su mandato en diciembre como diputada nacional; Marcelo Feliú, diputado provincial; y María Laura Biondini, actual secretaria de Gobierno de la municipalidad local.

Al momento de la marcha, la columna se extendió por unas tres cuadras, con exteriorizaciones contenidas en banderas, pancartas y carteles que aludieron a distintos sucesos de trágicos finales, como lo fue el de Luciana Moretti, en el 2004, en Ingeniero White.

El público, se dijo, superó los 4.000 asistentes, como marcada manifestación de repudio (y pedido de justicia), que no estuvo exenta de críticas a los poderes públicos y a la falta de soluciones ante la reiteración de la violencia de género en sus más diversas y dolorosas circunstancias.

La comunidad se manifestó solidaria. ¿Habrá un futuro, inmediato, en el que desaparezca el fantasma de los abusos de todo tipo?.