DISCURSO EMOTIVO ENTRE APLAUSOS Y CANTICOS DE MILITANCIA JUVENIL

Buenos Aires, 1 de marzo (Télam).- La presidenta Cristina Fernández de Kirchner pronunció hoy un detallado y emotivo discurso al inaugurar las sesiones ordinarias del Congreso Nacional, intrrrumpido en numerosas ocasiones por aplausos y cánticos de apoyo de los militantes jóvenes ubicados en los palcos del recinto de sesiones de la Cámara de Diputados.

En un discurso que duró algo más de tres horas, Cristina hizo un minucioso repaso de los logros económicos de su gestión, de las políticas que profundizará hacia el 2015 y fijó su posición en cuestiones como YPF, Malvinas, la tragedia ferroviaria de Once, los conflictos con gremios docentes y el traspaso del subterráneo al ámbito porteño.

La presidenta dedicó su primer saludo al ex juez español Baltazar Garzón, ubicado en el primer piso del recinto, junto a la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, y la de Madres, Hebe de Bonafini.

Garzón fue aplaudido por casi todas las bancadas y los presentes, incluída la Presidenta, a excepción del PRO y el peronismo federal.

En su extenso mensaje, Cristina hizo varias alusiones al fallecido ex jefe de Estado, Néstor Kirchner, y en muchas de ellas no pudo disimular su emoción y sus ojos con lágrimas, mientras recibía el apoyo de los legisladores oficialistas que la aplaudían de pie.

"La persona que más he querido en toda mi vida", dijo la presidenta, con lágrimas, una de las veces en que se refirió a Kirchner y más tarde completó: "He perdido lo que nunca pensé que perdería; cambiaría todo lo que gané por lo que perdí".

La jefa de Estado llegó al recinto minutos antes del mediodía y su llegada inundó el lugar con papeles que cayeron desde los palcos, donde los militantes jóvenes aplaudían y cantaban "Cristina corazón, acá tenés los pibes para la liberación".

A las 10.50 la militancia ya había celebrado el ingreso al recinto del vicepresidente Amado Boudou con el cántico "Atención, atención, Amado, te saludan los soldados de Perón", lo que fue retribuido por el titular del Senado con los brazos en alto.

Poco antes de las 11, Boudou abrió la Asamblea Legislativa para cumplir con la formalidad de designar a los legisladores que recibirían a la Presidenta en la puerta del Palacio Legislativo y se pasó rápidamente a un cuarto intermedio hasta casi el mediodía, cuando la jefa de Estado llegó a la explanada del Parlamento.

Desde otros palcos, el secretario de Comercio Guillermo Moreno le daba alfajores con la leyenda "Clarín Miente" al diputado nacional Eduardo Felletti, mientras el titular de la Anses, Diego Bossio, y el legislador porteño Juan Cabandié inflaban a pulmón globos blancos con la misma consigna.

Cánticos a "la gloriosa JP" y "yo no soy gorila, soy soldado de Cristina", fueron los más repetidos en las horas previas a la llegada de la Presidenta al recinto, donde resaltaron las ausencias del radical Ricardo Alfonsín, afectado por una lumbalgia, y de la ex líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió.

Tampoco estuvieron la vicepresidenta tercera de la Cámara de Diputados, Alicia Ciciliani, de viaje en España; el jefe de bloque de la Coalición Cívica, Adrián Pérez, y la legisladora Marcela Rodríguez (Democracia Igualitaria y Participativa).

Poco antes del mediodía se escuchó la Marcha Peronista, que arrancó desde los palcos más altos e hizo que todos los diputados del oficialismo se pusieran de pie para cantar y, algunos, agitar los brazos en alto haciendo la V de la victoria.