MOTIVOS DE ORGULLO…
Dos caricias para el alma, el mismo día.
Hay
circunstancias que llegan en momentos oportunos. Algunas, mucho más, porque
resultan una “caria para el alma”, siempre necesaria.. y especialmente cuando
afloran los recuerdos.
Este
jueves (7), en vísperas casi de una fecha memorable –el sábado 9 de cumplirán
200 años, nada menos, que del momento de la Declaración de la Independencia
Nacional– hemos tenido conocimiento de las palabras con las que el director del
Conservatorio Provincial ha resaltado el trabajo de Claudia María (Serralunga)
en esa institución educativa de nuestra ciudad.
Este
mismo día (7), vimos con sumo placer la fotografía que muestra a Lucrecia Mabel
(Serralunga), junto al coro de la escuela provincial número 5 “Nuestra Señora
de la Merced”, que actuó en el acto conmemorativo del aniversario patrio.
Podrán
parecer cosas muy simples.
Sin
embargo, han tenido la virtud de emocionarnos. Mabel, la mamá de Claudia y
Lucrecia, se sentiría inmensamente feliz. Desde el cielo, estará bendiciendo el
trabajo de sus dos hijas mujeres.
Luis María Serralunga
DESDE
EL CONSERVATORIO DE MÚSICA
Bahía
Blanca, mayo de 2016.
La
señora Claudia Serralunga ha cesado el día 25 de abril en su desempeño
dentro de ésta institución con cambio de función.
Su
desempeño ha sido ampliamente satisfactorio, destacándose su iniciativa
personal para resolver problemas, su espíritu enormemente colaborativo, el
conocimiento profundo de
la organización institucional, su asistencia casi perfecta y,
fundamentalmente, un enorme afecto por éste Conservatorio.
Todas
las virtudes expuestas se volcaban en su desempeño diario y, por eso, su
ausencia será muy notoria y difícil de paliar .
Le
deseamos los mayores éxitos en sus nuevos emprendimientos personales y la mejor
suerte.
Alejandro
Usabiaga, director del Conservatorio Provincial.
El orgullo que mi Papá siente por sus dos Hijas es mi propio orgullo. Mi nombre es Eduardo Luis Serralunga. Soy el mayor de Lucrecia Serralunga, Claudia Maria Serralunga, Adrian Serralunga y Mariano Serralunga. Mis hermanas -además de estudiosas, aplicadas, disciplinadas- son buenas. Mis hermanas son mi orgullo, A todos los que voy conociendo, les hablo de mis hermanas y mis hermanos. Yo soy lo que he podido o querido ser, muy poca cosa. Pero -tal vez sin ni derecho alguno- exhibo a mis hermanos/as. ¡ ¡ ¡Las quiero, mucho, Lucrecia Serralunga y Claudia Maria Serralunga! ! !
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