MALVINAS: LO TRASCENDENTE Y LO QUE NO LO ES

Hace 30 años, dos periodistas bahienses cubrieron la operación militar que recuperó las islas Malvinas, dice un título de tapa de la edición digital del diario bahiense.

La crónica sigue, expresando:

"A las 12:57 del 1º de abril de 1982 el buque Cabo San Antonio de la Armada Argentina navegaba frente a las costas de San Julián (provincia de Santa Cruz) cargado con 871 hombres.

Dos de ellos eran periodistas bahienses y recién en ese momento el comandante Carlos Büsser les confesó el verdadero motivo del viaje:

-Mañana vamos a recuperar nuestras islas Malvinas -les dijo.

Tanto el redactor Salvador Pichón Fernández como el fotógrafo Osvaldo Zurlo, ambos de La Nueva Provincia, se habían embarcado para cubrir un simple operativo naval. Y de pronto pasaron a ser testigos directos de la Historia.

También lo fue José María Enzo Camarotti, del diario La Razón. Los tres periodistas ya fallecieron.

El relato completo de semejante acontecimiento quedó registrado en un suplemento especial que publicó este diario en 2007, para el 25º aniversario de la gesta.

Se trata de una investigación periodística de Abel Escudero Zadrayec, titulada Malvinas. El desembarco de una primicia, y puede descargarse gratuitamente en formato PDF.

En 2008 ese texto fue selección oficial del premio de la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano que creó y preside el Nobel colombiano Gabriel García Márquez.

"El desembarco de una primicia logra algo excepcional. Nos ofrece una crónica de historia que está rigurosamente documentada y, a la vez, resulta de lectura compulsiva", dice en el prólogo Jon Lee Anderson, periodista estrella de la prestigiosa revista norteamericana The New Yorker y maestro de la FNPI.”

Nota del editor

Hemos trascripto el comentario del matutino local, que vuelve sobre publicaciones similares que han hecho desde hace 30 años a esta parte.

No está mal que se enorgullezcan de algo periodísticamente importante.

Sin embargo, pareciera ser que lo trascendente de la cosa ha sido la presencia de dos periodistas del diario y no la transitoria recuperación de las Islas Malvinas y la secuela de muertes que la guerra, lamentablemente, dejó como saldo y como inequívoca decepción.

Sin duda, como para pensarlo. De facilismos así, resulta la realidad de un país en permanente crisis. Que es moral, por encima de todo.